Perfiles de donantes: Sophia Harris de la Fundación Aall

Sophia Harris, una de las directoras de la Fundación Aall, conoció a Amigos de la Tierra tras una experiencia personal con polinizadores en las Islas Caimán. Sophia y sus vecinos empezaron a notar la muerte de cada vez más abejas en la isla y se preocuparon por las repercusiones que esto tenía para la salud de su comunidad. Su investigación, fruto de la preocupación, la llevó a conocer Amigos de la Tierra y nuestro trabajo para eliminar los pesticidas peligrosos.   

Tras analizar nuestros informes y estados financieros, quedó satisfecha con el nivel de impacto y transparencia. Sophia consideró que la colaboración con Amigos de la Tierra permitiría a la Fundación Aall generar un impacto positivo en nuestro planeta. Tras compartir esta información con sus colegas, los directores de la Fundación Aall decidieron por unanimidad apoyar nuestra labor.

La Fundación Aall tiene su sede en las Islas Caimán y su único objetivo es encontrar organizaciones benéficas eficaces que generen el mayor impacto posible en su meta de aliviar el sufrimiento humano. Cada director contribuye identificando organizaciones benéficas valiosas y eficaces que la Fundación Aall debería apoyar, con impacto global (además de organizaciones benéficas locales de las Islas Caimán). Los directores se reúnen periódicamente para informar sobre el progreso del trabajo que apoyan. A medida que evolucionan las necesidades mundiales, los directores se esfuerzan por responder a las cambiantes necesidades humanitarias.  

Si bien el objetivo es ambicioso, es difícil ignorar la urgencia y la necesidad de un planeta sano y sostenible para todos. Como dice Sophia, “la Tierra está sufriendo, y debemos priorizar el medio ambiente y apoyar a las comunidades que más dependen de un planeta sano”. En este momento, sería difícil encontrar a alguien que pueda decir con sinceridad que no se ve afectado por los cambios sin precedentes en nuestro medio ambiente, desde la falta de agua potable, la exposición a la contaminación tóxica y los pesticidas, hasta la migración climática y la intensidad de los fenómenos meteorológicos extremos.   

“Hace años, durante la temporada de huracanes, las tormentas abarcaban desde tormentas tropicales hasta huracanes de menor categoría, y los huracanes de categoría cinco se consideraban extremadamente raros o incluso experiencias únicas en la vida. El cambio ha sido palpable. Ahora parece que cada huracán es de categoría cinco, e incluso tormentas tropicales como Grace, en 2021, causaron daños intensos e inesperados en las Islas Caimán. Debemos hacer todo lo posible para cambiar, mitigar o revertir el rumbo del cambio climático. 

La preocupación de Sophia por el medio ambiente sigue creciendo, sobre todo al considerar las comunidades más afectadas por las prácticas insostenibles y negligentes de las corporaciones y los gobiernos. Comprender la relación entre los riesgos ambientales y las personas, las comunidades y los países ha influido en su proceso de concesión de subvenciones. La Fundación Aall es muy consciente de la importancia de financiar organizaciones como Amigos de la Tierra, que dan voz a las personas afectadas y trabajan con organizaciones comunitarias, en lugar de adoptar un enfoque autoritario.  

Al pensar en el futuro, a Sophia le preocupa cómo los problemas financieros globales afectarán los recursos y la necesidad de que las empresas rindan cuentas sobre sus prácticas sostenibles, dado que cada vez se preocupan más por sus resultados económicos. Sophia y la Fundación Aall reconocen a Amigos de la Tierra como un elemento clave para exigir responsabilidades a gobiernos y empresas en nuestra búsqueda de un planeta más sano y justo.