Perfiles de donantes: Rebecca Canright

Con 24 años, Rebecca Canright puede ser joven, pero comprende la importancia de planificar el futuro, tanto a nivel personal como a nivel social. Este año, Rebecca redactó su testamento e incluyó un legado a Amigos de la Tierra en sus planes. 

“Solo tengo 24 años, ¡pero me siento muy comprometida con Amigos de la Tierra y su importante labor para salvaguardar el futuro de nuestro planeta!”, afirma. “Es fundamental dejar la Tierra con más cuidado, respeto y sanación de la que la encontramos”.” 

Crecer en una granja orgánica en Nueva Jersey le inculcó a Rebecca un profundo aprecio por las plantas y los animales, así como por la interconexión de la vida. “Recuerdo que desde pequeña les hablaba a mis amigos sobre la importancia de cuidar el medio ambiente”, comenta.

Rebecca continuó sus estudios de política ambiental en Evergreen State College en Olympia, Washington. Como estudiante, asistió a jornadas de cabildeo ambiental para testificar en apoyo de proyectos de ley ambientales en la legislatura estatal de Washington. “Esto me ayudó a ver el poder transformador que se puede alcanzar cuando usamos la defensa del medio ambiente para proteger el planeta”, afirma.

Al redactar su testamento, Rebecca incluyó una donación a Amigos de la Tierra y, al hacerlo, se convirtió en miembro de nuestra Sociedad Tierra Compartida. “Quise incluir a Amigos de la Tierra en mi testamento porque deseo dejar un legado para ecosistemas futuros saludables. Nuestro mundo necesita nuestra atención y cuidado”.”

Rebecca siente una especial pasión por la protección de turberas, humedales y bosques, ya que son sumideros de carbono fundamentales. Esta pasión coincide con la de la Campaña Internacional de Bosques de FOE, cuyo objetivo es combatir la deforestación influyendo en la financiación de sectores que destruyen los bosques, como el aceite de palma y la ganadería; promoviendo políticas y prácticas que fomenten la diversidad biocultural; y fortaleciendo los derechos sobre la tierra y los recursos de las comunidades que dependen de los bosques.

 “Tenemos mucho más poder del que creemos”, afirma. “Me gustaría que mis compañeros jóvenes encontraran alegría en el activismo ambiental, por el bienestar de nuestro futuro y de las demás especies. Es una gran satisfacción saber que nuestras acciones pueden tener un impacto positivo en la Tierra; eso le da mucho sentido a la vida”.”

Sobre su legado a Amigos de la Tierra, Rebecca dice: "No querría dejar mi patrimonio en manos de nadie menos".“