Análisis: El coste del carbono es 15 veces superior al apoyo de Biden.

WASHINGTON, DC — Un nuevo análisis encontró que el costo social del CO2 se calcula en al menos 15 veces la cantidad que la Administración Biden apoya actualmente, que es de $51/ton. El análisis se presentó como comentario a la Oficina de Administración y Presupuesto como parte de un proceso para determinar el costo social de los gases de efecto invernadero (SC-GHG), lo cual representa un cálculo monetario del costo para la sociedad de una tonelada adicional de emisiones de gases de efecto invernadero.

“El costo social de los gases de efecto invernadero es una de las cifras más importantes de las que nadie ha oído hablar”, dijo Karen Orenstein, directora del programa de clima y energía de Amigos de la Tierra Estados Unidos. “Si Estados Unidos asumiera la parte que le corresponde del esfuerzo global para limitar el aumento de la temperatura global a 1,5 grados Celsius, el costo de una tonelada de emisiones de GEI sería tan alto que el apoyo gubernamental a las inversiones contaminantes para el clima sería inviable.” 

El 20 de enero de 2021, el presidente Biden restableció el Grupo de Trabajo Interinstitucional sobre el Costo Social de los Gases de Efecto Invernadero, previamente disuelto por Donald Trump, mediante la emisión de la Orden Ejecutiva 13990. La Orden Ejecutiva exige que las estimaciones de SC-GHG utilizadas por el gobierno federal reflejen la mejor ciencia disponible y tengan en cuenta el riesgo climático, la justicia ambiental y la equidad intergeneracional. 

“La actualización actual de los valores federales de SC-GHG representa una importante oportunidad para abordar la responsabilidad global de Estados Unidos de liderar acciones enérgicas para detener el cambio climático’, dijo Dra. Elizabeth A. Stanton, Directora y Economista Senior de la Clínica de Economía Aplicada. 

Entre las recomendaciones relativas a la revisión actual de la norma estadounidense SC-GHG, se encuentran:

• El SC-GHG debería utilizar una tasa de descuento del 1 por ciento (o inferior) que disminuya con el tiempo para representar la obligación ética de las generaciones presentes con las generaciones futuras.
• El SC-GHG debería incluir los daños climáticos en todo el mundo, no solo en Estados Unidos.
• El SC-GHG debería otorgar el mismo valor a todas las personas, familias y comunidades, en lugar de modelar prácticas que ponderen el valor de una vida humana perdida u otros daños climáticos en proporción a los ingresos locales o la producción económica.
• La modelización de los GEI a nivel nacional debe estar alineada con los niveles nacionales de reducción de emisiones determinados por análisis científicos, responsabilidad histórica y capacidad de actuación —la “parte justa” de Estados Unidos— para ser coherente con una alta probabilidad de limitar el aumento de la temperatura global a 1,5 °C.

Contacto de comunicaciones: Kaela Bamberger, [email protected], 202-222-0703