La aprobación federal de la liberación de mosquitos transgénicos no tiene en cuenta el riesgo.

La FDA aprueba el plan para liberar mosquitos genéticamente modificados en los Cayos de Florida a pesar de una evaluación de seguridad inadecuada.

WASHINGTON, DC — La semana pasada, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) aprobó la liberación de mosquitos genéticamente modificados en los Cayos de Florida sin una revisión exhaustiva de los riesgos asociados a dicha liberación. Esta liberación, la primera de su tipo, fue aprobada por la FDA a pesar de la indignación pública generalizada y una evaluación ambiental deficiente.

Según el Centro para la Seguridad Alimentaria, Food and Water Watch, Amigos de la Tierra y la Coalición Ambiental de los Cayos de Florida, esta liberación debería justificar una declaración completa de impacto ambiental. La empresa de biotecnología y control de plagas Oxitec instó a la FDA a acelerar la aprobación de un ensayo que implica la liberación masiva de millones de mosquitos transgénicos en la comunidad floridana de Key Haven. La solicitud de Oxitec a la FDA no afirma que la liberación de los mosquitos transgénicos reduciría enfermedades como el dengue o el zika. Más de 250 000 personas enviaron comentarios para criticar la revisión de la FDA sobre la liberación planificada de mosquitos transgénicos por Oxitec en Key Haven.

La revisión formal de la solicitud y la evaluación ambiental de la empresa por parte de la FDA no aborda cuestiones clave relacionadas con las liberaciones, como la seguridad para la salud humana, la posibilidad de que los mosquitos experimentales se propaguen fuera de las zonas de prueba y si un gran número de mosquitos transgénicos reducirá realmente la propagación de enfermedades como el virus del Nilo Occidental, el dengue o el Zika. La FDA omitió el procedimiento habitual de respuesta a los comentarios presentados en su expediente formal, que cerró el 13 de mayo de este año. Asimismo, la FDA modificó su política en el documento de orientación sobre la aprobación de animales e insectos transgénicos, de modo que ya no se requieren audiencias públicas. Estas acciones sugieren que la política, y no la ciencia, guía las decisiones de la agencia.

En Panamá, Brasil y Malasia, donde la empresa ya ha liberado los mosquitos transgénicos, la gente no pudo evitar inhalar e ingerir mosquitos debido a la gran cantidad de mosquitos liberados.

“Es inaceptable que la FDA apruebe la liberación masiva de insectos genéticamente modificados potencialmente dañinos sin contar con evidencia científica que respalde la decisión. La salud pública podría verse comprometida, especialmente considerando la probabilidad de ingerir mosquitos transgénicos y la posibilidad de que algunos mosquitos no estén esterilizados eficazmente”, declaró Jaydee Hanson, analista sénior de políticas del Centro para la Seguridad Alimentaria.

“La evaluación y las pruebas de la FDA fueron insuficientes. ¿Cómo se reproducirán los mosquitos transgénicos en la naturaleza y cuáles serán las inevitables consecuencias no deseadas? Estas preguntas no han sido respondidas de manera responsable”, declaró Dana Perls, responsable de campañas de alimentación y tecnología de Amigos de la Tierra en Estados Unidos. “Deberíamos usar las alternativas menos tóxicas que no tengan consecuencias no deseadas para nuestro medio ambiente y nuestra salud”.”

Los residentes de los Cayos han expresado su preocupación por su seguridad. En noviembre, los ciudadanos de Key Haven y del condado de Monroe votarán para asesorar a la Junta de Control de Mosquitos de los Cayos de Florida sobre si las liberaciones de mosquitos deben llevarse a cabo. Con la aprobación de la FDA, la decisión final recaerá en la junta.

“Los residentes de Florida no quieren que se liberen mosquitos transgénicos en sus propiedades. Las próximas votaciones del 8 de noviembre permitirán a los habitantes de los Cayos decidir si desean o no la liberación de los mosquitos, pero la Junta de Control de Mosquitos de los Cayos de Florida no está obligada a acatar los resultados. Esto no es propio de una democracia. La Constitución de los Estados Unidos prohíbe este tipo de apropiación indebida de nuestras tierras y nuestra salud por parte del gobierno‘, declaró Barry Wray, director ejecutivo de la Coalición Ambiental de los Cayos de Florida.

“Es inexcusable que la FDA no haya realizado una revisión exhaustiva sobre cómo se propagarán estos mosquitos transgénicos en el medio ambiente y sus posibles impactos en los ecosistemas locales”, declaró Wenonah Hauter, directora ejecutiva de Food & Water Watch. “La agencia parece tan ansiosa por acelerar el proceso que está dispuesta a ignorar la preocupación generalizada de las personas que tendrán que someterse a este experimento”.”

El Centro para la Seguridad Alimentaria está considerando la posibilidad de emprender acciones legales contra la aprobación de la FDA sin un análisis completo del impacto ambiental, tal como recomendó la organización en su informe. Comentarios del 13 de mayo de 2016 a la agencia. Un informe completo sobre el impacto ambiental debe comparar todas las estrategias para controlar los mosquitos, incluido el uso de la bacteria Wolbachia para esterilizarlos.

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Contacto experto: Dana Perls, (510) 978-4425, [email protected]
Contacto de comunicaciones: Kate Colwell, (202) 222-0744, [email protected]