Científicos, grupos ecologistas y de consumidores critican la aprobación por parte del USDA de la manzana transgénica

WASHINGTON, DC – Científicos, grupos ambientalistas y de consumidores denunciaron la desregulación por parte del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) de la manzana Arctic®, la primera manzana transgénica producida por la corporación canadiense Okanagan Specialty Fruits. La desregulación del USDA permite técnicamente que la manzana Arctic® se cultive y venda sin supervisión específica, aunque la FDA podría entablar con Okanagan un proceso voluntario de consulta sobre seguridad antes de que la manzana transgénica esté disponible en el mercado estadounidense. Según Okanagan, las manzanas se etiquetarán como Arctic®, pero no se indicará que son transgénicas.

A pesar de esta aprobación, importantes empresas alimentarias como McDonald's (NYSE: MCD) y Gerber (OTCMKTS: NSRGY) ya han declarado que no tienen previsto adquirir ni vender esta manzana transgénica. Estas empresas se suman a las principales asociaciones de productores de manzana, como USApple y el Northwest Horticultural Council (que representa a los productores de manzana de Washington, quienes cultivan más del 60 % de las manzanas de EE. UU.), que se han manifestado en contra de esta manzana transgénica.

“A pesar de la aprobación defectuosa del USDA a la manzana transgénica, no hay lugar en el mercado estadounidense ni en el mundial para las manzanas modificadas genéticamente”, afirmó Lisa Archer, directora del programa de Alimentos y Tecnología de Amigos de la Tierra. “Los agricultores no quieren cultivarla, las empresas alimentarias no quieren venderla y los consumidores no quieren comerla”.”

La manzana transgénica Arctic Apple® se modifica genéticamente mediante una nueva técnica experimental, prácticamente sin precedentes, llamada interferencia de ARN (ARNi), que preocupa a muchos científicos por sus posibles efectos negativos e imprevistos en la salud humana y el medio ambiente. Esta técnica se utilizó en la Arctic Apple® para silenciar los genes relacionados con la producción de enzimas que provocan el oscurecimiento de las manzanas al cortarlas. Sin este oscurecimiento natural, las manzanas pueden parecer frescas cuando en realidad se están descomponiendo.

Los científicos creen que la enzima de pardeamiento natural de las manzanas podría ayudar a combatir enfermedades y plagas, lo que significa que los agricultores podrían tener que aumentar el uso de pesticidas en estas nuevas manzanas transgénicas. Las manzanas convencionales, no transgénicas, ya contienen algunos de los niveles más altos de residuos tóxicos de pesticidas, muchos de ellos relacionados con alteraciones hormonales, daños reproductivos y TDAH.

“Nos preocupa que la evaluación de seguridad del USDA sobre esta manzana haya sido inadecuada, particularmente en lo que respecta a las implicaciones para la salud y el medio ambiente de esta tecnología de ARN de interferencia en particular”, dijo el Dr. Michael Hansen, científico principal de Consumers Union.

Los científicos también temen que, si bien el proceso de ARN de interferencia (ARNi) de Okanagan busca silenciar cuatro genes de la manzana, podría ser peligrosamente impreciso: las secuencias genéticas objetivo son similares a otros genes estrechamente relacionados, por lo que el proceso de silenciamiento podría afectar involuntariamente a genes que influyen en otras funciones de la planta. La solicitud de desregulación de Okanagan tampoco analiza adecuadamente las demás funciones potenciales que podría tener la secuencia genética objetivo, más allá del oscurecimiento de las manzanas, ni aborda el riesgo de silenciar involuntariamente genes no objetivo. No está claro cómo el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) evalúa los riesgos del silenciamiento génico y otras biotecnologías emergentes de gran alcance.

Si se cultivan comercialmente, las granjas orgánicas y convencionales también se enfrentan al riesgo de contaminación por parte de huertos de manzanas transgénicas vecinos. Los representantes del sector manzano han manifestado su preocupación por la posibilidad de que la contaminación cruzada provoque que importantes mercados de exportación, como Europa y China, rechacen las manzanas cultivadas en EE. UU. o exijan costosas pruebas y certificaciones a los agricultores y las empresas exportadoras.

Al igual que otros OMG, esta manzana transgénica no estará etiquetada ni habrá sido sometida a una evaluación de seguridad independiente; los reguladores confiarán en la propia evaluación de la empresa sobre la seguridad de la manzana para el consumo humano.

Las manzanas son solo el comienzo: Okanagan Specialty Fruits también ha anunciado planes para introducir melocotones, cerezas y peras transgénicas en un futuro próximo.

“Resulta interesante que el USDA decidiera aprobar esta manzana transgénica el viernes 13 de este mes.”^el —Sin duda, es un día aciago para los productores de manzanas, los consumidores y las empresas alimentarias que no desean este nuevo transgénico innecesario —dijo Archer—. Seguiremos trabajando para garantizar que el mercado —desde los supermercados hasta las empresas de alimentos infantiles— siga escuchando a la mayoría de los consumidores que no quieren consumir este ni otros alimentos transgénicos nuevos que no han sido suficientemente estudiados ni etiquetados. Y continuaremos la lucha para que todos los transgénicos estén etiquetados y así proteger el derecho de los consumidores a saber qué dan de comer a sus familias.”

Nota para los editores: Cartas dirigidas a McDonald's y Gerber firmadas por grupos ambientalistas, de consumidores, de padres y de seguridad alimentaria, y cartas de McDonald's y Gerber aquí: www.nogmoapples.org

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